Cuando muere un ser querido, aún con el dolor que se siente, se debe iniciar una serie de gestiones y trámites que necesariamente deben desarrollarse para cumplir con las exequias y darle el reposo final a ese ser amado que partió. Eso incluye el sitio donde descansarán sus restos, y por supuesto la lápida que se colocará y que marcará su estancia final. Esto servirá para recordar y honrar su vida.
La muerte de un familiar o ser querido siempre deja un dolor en el alma, sin embargo, aún con ese pesar, hay que afrontar todas las gestiones necesarias para darle la última despedida.
Uno de esos necesarios trámites es la ubicación del lugar donde se dará eterno descanso a los restos del fallecido y, por supuesto, la debida adecuación y decoración de los espacios correspondientes, lo cual incluye la colocación de la lápida y los mármoles que integrarán el aposento final.
Es un espacio que debe ser especial, que debe expresar lo que se siente hacia esa persona amada, debe ser una verdadera obra de arte que de por sí transmita todo ese amor y admiración hacia el familiar o amigo fallecido.
Es en esta parte donde más atención hay que poner, por cuanto al ser el sitio final donde reposará el cuerpo del fallecido, debe ser especial para honrar y representar con ella todo lo que dejó y significó en vida esa persona.
Una hermosa lápida siempre será una hermosa forma de homenajear su legado y de darle un hermoso adiós a ese ser querido que parte hacia un plano espiritual, sin duda, es la mejor manera de darle el descanso que merece.
¿Dónde hacer las mejores lápidas?
Al ser una estructura que permanecerá de por vida, las lápidas deben elegirse muy bien y para eso lo más recomendable es dejarse asesorar con especialistas en la materia, con empresas dedicadas a su fabricación e instalación. Una de las empresas del sector que se ha convertido en referente es el Grupo Écija, que elabora las mejores y más creativas lápidas que se pueden encontrar en el mercado.
Esta empresa desarrolla mármoles y lápidas de excelente calidad, fabricadas con lo último en tecnología, lo cual permite incorporar nuevos elementos que le dan un toque diferente y muy distintivo, como por ejemplo, la inscripción de textos con láser que ofrecen acabados extraordinarios.
También se puede incluir la foto del fallecido mediante tecnología avanzada, para que su imagen quede ahí de forma perenne, de recuerdo para quienes vayan a visitarlo en su estancia final.
Écija fabrica lápidas con ese toque personal que siempre se les quiere dar, para marcar la diferencia y lograr resultados fuera de serie, todo en homenaje a ese ser querido que estará descansando eternamente.
Los mármoles del Grupo Écija en Toledo son de excelente calidad, diseñados para perdurar en el tiempo y, a la vez, crear un ambiente hermoso y de admiración para quienes vayan luego a visitar a su familiar.
El equipo de profesionales que colaboran con la empresa, que cuenta con una exitosa trayectoria en el oficio, son maestros en el arte de crear extraordinarias lápidas y mármoles que siempre fascinan a todos aquellos que las aprecian. Son artistas más que fabricantes de lápidas, por lo que se han ganado un gran respeto en su sector.
Verdaderas obras de arte
Con el Grupo Écija se pueden crear obras maestras en lápidas y nichos personalizados, a gusto del cliente, a los que se pueden añadir incrustaciones y textos grabados o en relieve, muy duraderos, confeccionados en distintos colores y con materiales de extraordinaria durabilidad y belleza.
Fácilmente pueden diseñar el producto que necesites para rendirle un merecido homenaje a tu familiar o ser querido, con lápidas fuera de lo común, que puedes personalizar. Todo es cuestión de asesorarte bien con ellos, y elegir la lápida y el diseño que más se adapte a las necesidades, preferencias y presupuestos.